Fanfic: Secuestro Encantador [ Mark Tuan Y Tu] Capitulo 21

Fanfics

Fanfic: Secuestro Encantador [ Mark Tuan Y Tu] Capitulo 21

Autora  Natalia Tavera Regresó Mark yo habíamos salido de aquel salón lleno de personas, quería estar a solas con él, […]

Fanfic: Secuestro Encantador [ Mark Tuan Y Tu], prologo

Autora  Natalia Tavera

Regresó

Mark yo habíamos salido de aquel salón lleno de personas, quería estar a solas con él, en un lugar tranquilo donde nadie pudiera molestarnos.

Había estado conduciendo como un loco eran las 3:00 am y juraba que estábamos perdidos en medio de la nada.

-Mark, ¿dónde estamos? – pregunte al fin

-Estoy seguro que te va a encantar – dijo sin despegar la vista de la carretera

No tenia ni la menor idea de cual era nuestro destino.

El paisaje había cambiado de un momento a otro, estábamos rodeados de árboles bastante altos, los sonidos de animales nocturnos se escuchaban por casi todo el lugar.

-¿qué es esto Mark? – pregunte

-Un pequeño bosque, ¿no te gusta? –

-Es increíble, me encanta- Sonreí de oreja a oreja

Mark me miro tiernamente, se inclino un poco hacia mi y depósito un suave beso en mis labios.

-Podríamos haber muerto- dije

-De todos modos ya hemos llegado – dijo antes de incorporarse

Negé con la cabeza y solté un suspiro

-Vamos a entrar, comienza a hacer un poco de frío – Dijo Mark antes de bajar del auto

Al abrir la puerta de aquella camioneta mis ojos no pudieron disfrutar del todo el paisaje, todo estaba obscuro detrás de mí.

Una pequeñas lamparas iluminaban la entrada de aquella puerta enorme de la cabaña.

A lo lejos se escuchaba el caer de una cascada, pude imaginarme aquel lugar cuando los rayos del sol entraran por el centro de todos los árboles que había aquí.

-¿Te gusta? – pregunto Mark por segunda vez

-Es hermoso este lugar- dije

-Este es el lugar que quiero compartir contigo toda mi vida y si me permites decirlo, quiero formar una familia contigo-

-¿cuántos hijos quieres? – camine hacia él y rodee su cuello

-Dos esta bien- sonrió

Fue allí donde nos besamos y nos dimos cuenta de que nos deseábamos más de lo normal, tal vez llegará a pensar al día siguiente que lo estábamos apunto de hacer Mark y yo estaba mal, pero mi corazón latía a una velocidad increíble y algo me decía que era lo correcto.

Mark me depósito con cuidado en la enorme cama que había en esa habitación, aquel cuarto se lleno de caricias y besos tiernos. La temperatura de nuestros cuerpos comenzaron a subir a tal punto de que la ropa estorbaba.

-¿quieres hacerlo? – La voz de Mark estaba entre cortada

-Nunca había estado más segura- Sonreí

Fue allí donde la abrimos paso a la felicidad y nos dejábamos llevar por el deseo hambriento que sentíamos.

                        NARRA MARK

Un aroma delicioso provenía de la planta baja, Sonreí al pensar que ______ había cocinado para mi.

Inmediatamente me puse unos pantalones y deje al descubierto mi torso, baje lo más rápido y silencioso que pude las escaleras.

Me recargue en el marco de la puerta al ver tal escena, _______ tenía en la mesa unas cuantas frutas picada, waffles y estaba preparando algo más. Caminé hacia ella y la rodee por la cintura con mis brazos.

-Buenos días señora Tuan- dije besando su mejilla

-Buenos días cariño- dijo sonrojada

-Quiero eseñarte un lugar maravilloso, ¿vamos después de desayunar? – pregunte

-Claro, toma asiento que esta vez tenemos mucho que comer- sonrió

                          NARRA ______

-Estoy apunto de regresar a casa Mark, esto me da un poco de miedo- respondí

-Vamos _____ no falta mucho, estamos por llegar-

Desde lejos pude escuchar el sonido de una cascada que no quedaría muy lejos, el paisaje comenzó a cambiar de un momento a otro,los árboles eran más grandes y flores que sin duda alguna eran las más lindas que había visto hasta el momento.

-Hemos llegado – sonrió Mark

Mi mirada se había perdido entre tanta belleza que había a nuestro alrededor, el azul del agua era uno que jamás había visto en mi vida.

-Quiero casarme aquí – solté de repente

Mark sonrió con ternura acompañado de su mirada.

-De hoy en adelante todo lo que digas lo haré sin reproches- beso mi frente

-Entonces quiero que nades conmigo ahora- Sonreí

-No traje nada para después – contesto

-Quítatelo todo, total no hay problema- llevate una ceja

Al caminar de los dos las prendas de cada uno iban dejando un pequeño camino entre las hojas verdes que adornaban el lago.

Nos sumergimos entre aquellas aguas que fue testigo de nuestro amor.

-Esto se esta haciendo costumbre – dije al separarme

Mark levanto suavemente los hombros

-Seamos padres jóvenes- sonrió pícaramente

Sentí como un leve rubor se apoderaba de mí.

Terminé enredando mis piernas en su torso bien formado.

Al pasar el tiempo, comenzaba a ocultarse un poco el sol, habíamos vuelto a la cabaña tomados de la mano y hablando sobre la boda que se llevaría acabo dentro de un mes.

-¿qué quieres comer? – pregunto Mark

-Preparemos un poco de ramen, es tu especialidad- lo bese suavemente en los labios

-Estoy completamente de acuerdo – Mark me devolvió el beso

-Solo espera un poco, voy a decirle a mamá que vaya diseñando un vestido hermoso- Sonreí

-Hasta en ropa interior te verías genial – levanto una ceja

Golpeé a juego su hombro y subí las escaleras rápidamente.

Tomé mi teléfono y teclee a toda velocidad el número de mi madre.

Antes de oprimir el botón de llamada mi celular comenzó a vibrar, un numero desconocido estaba llamándome, tal vez era mi padre o los padres de Aiden.

Sin pensarlo dos veces deslice para contestar, fue el peor error de mi vida

-_____ he vuelto, ¿me extrañaste?- reconocía esa voz -Esta vez terminaré contigo y con Mark, se que van a casarse, pero…  ¿acaso te olvidaste que tu eres mi esposa? Eres cruel – rió

Mi miedo regreso, sabía que esto pasaría, sabia que iba a arruinar mi vida.

Mis piernas comenzaron a temblar a gran velocidad que me hicieron caer, la voz y los pasos de Mark se escuchaban cada vez más cerca, quería gritar su nombre pero no me era permitido.

-_______ ¿ que pasa? – Mark se puso de rodillas

-Volvió – dije llorando.

-¿Quién? – me miró confundido

-Bam Bam, volvió nuestra pesadilla- dije

Estaba consciente de que él sabía dónde estábamos y cuando nos casaríamos.

Esta pesadilla había iniciado de nuevo.

Continuara…

¡No olvides leer estas notas!

Te puede interesar

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *