Fanfic: HUNTERS (Stray Kids e ITZY) Capítulo 14

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Fanfic: HUNTERS (Stray Kids e ITZY) Capítulo 14

Autora YASSGY0MIE Capítulo 14 HYUNJIN POV Era sábado por la tarde y RyuJin por fin había cedido a quedar conmigo un […]

Fanfic: HUNTERS (Stray Kids e ITZY) Prologo

Autora YASSGY0MIE

Capítulo 14

HYUNJIN POV

Era sábado por la tarde y RyuJin por fin había cedido a quedar conmigo un rato, habíamos ido a comer pipas a un parque, era de lo más simple, pero para mí cualquier momento con ella valía oro.

-Traigo otra – RyuJin volvió de la tienda con otro paquete de pipas y me las enseñó mientras sonreía y caminaba hacia mí.

Realmente me sentía muy atacado cuando la miraba, era preciosa, los pantalones militares anchos menos por la cintura y los tobillos le quedaban de miedo con esa camiseta de tirantes blanca y a juego con el pelo rosa, además era la primera réplica que tenía tatuajes y a mí me flipaban.

-Las he cogido con extra de sal – me dijo sentándose en mis piernas – son las que me has pedido, ¿no?

-Creía que no me estabas escuchando – admití abriendo el paquete.

-Yo siempre te escucho – me dijo ofendida y pasándome el brazo por los hombros.

-No, mi amor, a veces noto que desconectas – reí metiéndome una pipa en la boca y mirándola fijamente a los ojos mientras ella me negaba con la cabeza.

-Lo parecerá, pero no es así – me aseguró y yo la miré no muy seguro de lo que me decía – he escuchado cual será tu próximo tatuaje – me señaló con el dedo y abrí los ojos sorprendido.

-Vale, sí, me escuchas – dije dándome por vencido y pasando mi mano por su cintura.

-Pues sigue hablándome – me pidió ella mirándome con atención.

-¿Por qué no hablas tú?

-Porque me gusta escucharte – admitió encogiendo los hombros.

-Me muero de amor – grité como un maldito exagerado – ¿pero como no quieres que me enamore así, RyuJin? – le cogí las mejillas con una mano y las apreté para que sus labios sobresalieran – te voy a robar incluso un beso, porque sí, porque me apetece – reí y le di un beso corto, ella solo rió.

-¿Y si no lo quería yo? – me preguntó agarrándose a uno de mis hombros.

-¿Cómo no lo ibas a querer? ¿Pero tú me has visto? – me señalé el cuerpo entero mientras sonreía y ella rodeó mi cuello también con su otro brazo para tenerme bien cogido y volver a besarme sin permiso – se me ha olvidado el respirador en casa y creo que me va a dar un ataque – bromeé.

-¿Por qué no te callas, HyunJin? – me preguntó ella cogiendo mi mejilla.

-Sí, perdón, puedes volver a besarme – dejé la bolsa de pipas en el banco y agarré su cintura con mi mano.

Ella volvió a pegar sus labios a los míos y enseguida noté nuestras lenguas encontrarse y tocarse con cuidado, su boca me sabía a gloria después de tanto tiempo, pero no besaba igual que la anterior réplica, los besos de RyuJin eran más profundos y su lengua se movía con lentitud, queriendo saborear cada rincón de mi boca y que yo saborease el suyo.

RyuJin se me había hecho tanto de rogar que ahora que la estaba besando no quería dejar de hacerlo, pero nos apartamos cuando unos niños entraron en el parque a jugar.

-No es hora de estar en el parque – me quejé en un susurro y escondiendo mi cara en el cuello de RyuJin.

-Son las seis de la tarde, sí es hora de estar en el parque – dijo ella mirando el bosque y mordiéndose los labios.

-¿Quieres que vayamos? – le pregunté leyéndole los pensamientos y sonriendo – ahí sí estaremos solos, a los niños les da miedo el bosque, podrían encontrarse con un bellezón como yo y caer hipnotizados por mi guapura.

-Claro, no me gustaría estar en su lugar – dijo ella siguiéndome el rollo y agarrándome la mano para que la siguiera.

-Pues tú te estás liando con él – sonreí.

-Madre mía, no sé cómo sigo viva – rodó los ojos y nos adentró en el bosque.

-Yo tampoco – bromeé observando como se giraba a mirarme de nuevo con una amplia sonrisa dibujada en sus labios – no, no me mires así que a mi me da un infarto – exageré.

-Deja de hablar de una vez y bésame – me pidió atrayéndome a su cuerpo.

Yo sonreí mordiéndome el labio inferior y la besé de nuevo, agarrando con fuerza su cintura y rompiendo esa barrera de los besos lentos para hacer que fueran más intensos y profundos, la deseaba más que a nada en ese momento y podía notar por como sus manos tocaban mi pecho y mi cuello que ella también empezaba a desearme mucho. Ambos, sin dejar de besarnos ni separarnos un solo centímetro nos movíamos lentamente, adentrándonos más y más en ese bosque, asegurándonos que nadie podía vernos e interrumpirnos.

-Espera – RyuJin sonrió levemente sobre mis labios, cogió mis muñecas e hizo que pusiese las manos en su culo – ahí están mejor.

Yo sonreí, bajé más las manos para agarrar sus piernas y la cogí para que las enredase en mi cintura.

-Y tú ahí estás mejor – le dije apoyando su espalda en la pared, no lo necesitaba, para un vampiro ella era una pluma, pero tenía que disimular, aunque si supiese lo que era y pudiese usar todos mis dotes con ella, seguro que lo pasaría mejor.

Continuamos besándonos, con sus manos toqueteando mi pelo negro y jugando con él, nuestros cuerpos calientes estaban demasiado pegados y excitados en ese momento y estaría seguro de que habríamos llegado a más si no fuera porque oímos un fuerte aullido de lobo muy cerca nuestro.

-¿Qué ha sido eso? – preguntó ella levantando la cabeza para mirar a nuestro alrededor.

-Un lobo – dije yo, sabía de sobras que era JungKook, lo teníamos muy cerca, lo sentía – vámonos, tengo miedo.

-HyunJin – golpeó un par de veces mi hombro y bajó al suelo mirando fijamente y algo asustada un árbol que teníamos al lado.

Solo eran un par de árboles a nuestra derecha, había otro policía ahorcado, era otro sacrificio y había ocurrido delante de nuestras narices sin que nos diésemos cuenta.

-¿Se ha suicidado? – me preguntó ella agarrándome la mano y acercándose poco a poco.

-No sé, RyuJin, deberíamos irnos y llamar a la policía – le dije intentando tirar de ella para que no se acercase, porque sentía a JungKook entre nosotros, estaba seguro que nos estaba observando desde algún lugar muy cercano – RyuJin.

-No seas miedica – me dijo ella quedándose frente al cuerpo y yo miré a mi alrededor, buscándolo por algún lugar – sí, deberíamos llamar a la policía.

-Vale, pero fuera del bosque – dije tirando definitivamente de ella mientras ella marcaba el número en su teléfono.

Oí como llamaba e informaba de la situación, me extrañó que lo hiciera de forma anónima, pero sería cosa de cazadores.

Yo la metí en mi coche sin que rechistase y conduje hasta su casa para ponerla a salvo, por el camino recibí un mensaje de Chan preguntándome cómo estaba, porque de repente todos los vampiros habían comenzado a encontrarse realmente mal y escupían sangre negra por la boca, pero yo me encontraba bien.

-¿No entras? – me preguntó RyuJin parada en la puerta de su casa.

-No, me voy a mi casa, JaeMin me ha dicho que no se encuentra bien y voy a prepararle una sopita – dije sonriendo.

-Gran amigo – sonrió – ten cuidado – dijo mirando el bosque.

-Tranquila, iré por la ciudad – me acerqué a agarrarle las mejillas – ten cuidado tú también, es el segundo suicidio en tres días.

-Ya, pero, ¿crees que son suicidios? – me preguntó muy seria y agarrándome las muñecas.

-Sí, ¿qué otra cosa podría ser? – fruncí el ceño, fingiendo estar confundido.

-En el libro que me regalaste sobre cosas sobrenaturales habla de sacrificios – encogió los hombros.

-Pero en este pueblo no hay cosas sobrenaturales, RyuJin – reí y ella se lamió los labios mirándome fijamente a los ojos – eso es solo un libro – besé sus labios – me voy con JaeMin, que se muere.

-Cuídalo – me dijo cuando me separé de ella.

-Claro, es como mi bebé – bromeé abriendo la puerta del coche – te quiero, mi amor – le grité lanzándole un beso y ella sonrió – ¿no me vas a decir que me quieres?

-No – se dio la vuelta y abrió la puerta de su casa – hasta luego, HyunJin.

-Pues ahora lloraré por tu culpa – me encerré en el coche y ella me lanzó un beso que yo me llevé con la mano directo al corazón y ella rió.

Esperé a que se metiese en casa y cerrase y después me adentré en el bosque para ir a la mansión, ya no sentía la presencia de JungKook, aunque sí la sentí de camino a casa de los cazadores, cosa que me preocupaba porque ahora lo teníamos más encima que nunca y aún no sabíamos como pararlo porque los híbridos eran total y completamente inmortales e imparables.

Cuando llegué a la vieja mansión donde vivíamos entré corriendo y allí estaban algunos de los lobos, ayudando a los vampiros que, literalmente, parecía que en cualquier momento se morían.

-¿Qué coño está pasando? – le pregunté a Chan y JiSung, que estaban entretenidos con Felix.

Mi amigo sudaba frío, pero su cuerpo estaba ardiendo, tenía las comisuras de los labios llenas de sangre de color negra, temblaba y los colmillos los tenía sobresaliendo de sus labios.

-No lo sabemos, después de oír el aullido todos los vampiros han empezado a encontrarse mal – me dijo Chan y me miró fijamente.

Antes de que pudiese decirme algo JaeMin y Lia entraron por la puerta alterados y los lobos miraron hacia allí, como si hubiesen oído algo.

-El tercer aullido – dijeron JiSung y Chan a la vez.

-Ha habido otro sacrificio, aquí cerca – avisó JaeMin y se acercó a Felix – ¿estás bien?

-¿Dónde está Lee Know? – preguntó Lia mirándonos.

-Arriba, con Mark y Lisa – le dijo JiSung limpiando las comisuras de Felix.

-JaeMin, YuNa está sola en el bosque – le dijo Felix agarrándolo del brazo – búscala.

Él nos miró y le asentimos con la cabeza para dejar que se marchara.

-¿Por qué estás bien? – me preguntó Chan poniéndose muy serio – ¿no te encuentras mal?

-Que va, me encuentro como siempre, ¿yo qué sé por qué estoy bien? – pregunté alterado – ¿dónde está HueningKai?

-En tu habitación, creo que Jeno era el que estaba con él – me dijo JiSung.

Yo asentí y salí corriendo hasta mi habitación, allí estaba HueningKai en el mismo estado que Felix, pero estirado en mi cama y con Jeno de rodillas en el suelo a su lado.

-Dame la mano, voy a intentar quitarte algo de dolor – le dijo Jeno intentando cogerle la mano.

-Yo a ti no te doy nada que estás como una maldita cabra – le contestó HueningKai con la respiración acelerada.

-HueningKai, dale la mano, puede quitarte un poco el dolor – le dije adentrándome en la habitación.

-¿Ves? Te lo he dicho, puto retrasado – Jeno acabó cogiéndole la mano, apretándosela y cerrando los ojos.

Todas las venas de los brazos de Jeno se volvieron negras, estaba pasando todo el dolor de HueningKai a su cuerpo para aliviarlo.

-Para que luego me digas que lo odias – le dije yo cuando le soltó la mano – pero bien que te preocupas, ¿no te estarás enamorando de mi niño? – bromeé – no me gustas para él, eres bastante violento.

-Estoy con Lisa – me recordó él levantándose del suelo – voy a ayudar a los demás, aquí te quedas con tu niño.

Yo asentí y me senté en la cama al lado de HueningKai y mirándolo preocupado, le aparté el pelo de la frente y sonreí un poco.

-¿No te duele nada? – me preguntó él cogiéndome la mano.

-No – dije mirando de reojo por la ventana, porque de nuevo lo sentía muy cerca – ¿estás mejor? ¿ha servido lo de Jeno?

-Sí – asintió con la cabeza y quité con mi pulgar un poco de sangre negra que salía de su nariz – ¿qué pasa? – miró por la ventana como yo.

-JungKook está por los alrededores, lo siento – le dije lamiéndome los labios con nerviosismos y sin apartar mi vista de la ventana.

-HyunJin – apretó mi mano – tus ojos – murmuró.

Yo pestañeé un par de veces y lo miré a él.

-¿Qué pasa? – le pregunté yo.

-Se te han puesto rojos – frunció el ceño y yo alcé mis cejas – como los de Jeno o Chan al transformarse.

-¿Qué? – cogí mi móvil para mirármelos, pero estaban de mi color negro de siempre.

-Se te han quitado al pestañear – tosió un poco.

-Habrá sido cosa tuya, HueningKai – sonreí un poco – descansa un rato – le acomodé la almohada y volví a mirar por la ventana para vigilar.

YUNA POV

Felix había desaparecido de la nada, lo había perdido en mitad del bosque y después me había encontrado con el cuerpo de un policía colgado de un árbol, así que decidí volver a casa en cuanto antes para hablar con los demás, además había escuchado un aullido de lobo muy fuerte, como si no fuese de lobo, como si fuese de un verdadero híbrido.

-YuNa – cuando pisé el primer escalón de la entrada de mi casa oí la voz de JaeMin detrás de mí – YuNa – repitió llegando frente a mí e inclinándose hacia delante para apoyar las manos en sus rodillas y respirar agitado por el cansancio de haber estado corriendo – cojones, que cansado estoy.

-¿Qué haces aquí? – le pregunté poniéndole la mano en el hombro.

-Acabo de ver un muerto en el bosque y he venido aquí porque me ha entrado el miedo y mi casa está más lejos – me explicó él poniéndose recto – además, mejor pasar miedo con un pibón como tú – me guiñó el ojo con las manos en la cintura.

-Yo también lo he visto – dije abriendo la puerta y entrando en mi casa, lo miré para que entrase, pero no lo invité a hacerlo, por si era un vampiro, porque últimamente sospechaba tanto de él como de Felix.

-Gracias – me dijo pasando sin ningún problema y suspiré más tranquila.

Al pasar por el salón los vimos a todos conversar muy serios y RyuJin miró a JaeMin con el ceño fruncido, confundida, como si no lo esperase allí.

-Ahora vuelvo – dije agarrando la mano de JaeMin para subir las escaleras.

-Vuelve rápido – me dijo mi hermano.

Yo solo subí con JaeMin y me metí en la habitación donde teníamos la piedra lunar y caminé hacia esa vitrina hechizada donde estaba metida, JaeMin me siguió mirándome confundido.

-¿Qué es? – preguntó quedándose a mi lado y mirándolo, esta brillaba, tenía grietas que emitían una luz desde dentro.

-Nada importante, viene de familia – le mentí yo – he tenido un mal presentimiento y quería asegurarme de que seguía aquí – le expliqué.

-¿Dónde va a ir? Es una piedra, YuNa – frunció el ceño sin dejar de mirarla.

Yo giré mi cabeza para mirarlo y abrí bien los ojos cuando vi que los suyos brillaban de un color azul intenso mientras observaba la piedra.

-JaeMin, mírame – le agarré la barbilla y le giré la cabeza para que mirase mis ojos, pero ya los tenía negros otra vez.

-¿Qué pasa? ¿Tanto tiempo sin mirar estos alucinantes ojos te altera o qué? – bromeó sonriente.

-Los tenías azules – tartamudeé.

-Ojalá los tuviese – rió – un día salí con una chica que los tenía azules y me flipaban, eran lentillas, pero me flipaba igual, le daba un toque así exótico, ¿sabes? – me explicó con ilusión.

-Voy enserio.

-Yo también – se señaló con el pulgar y suspiré.

Miré la piedra de nuevo, podía ser todo fruto de mi imaginación, la piedra tenía un poder muy fuerte y era recomendable no estar muy cerca de ella porque empezabas a distorsionar la realidad, mi hermano, cuando ocurrió el primer sacrificio y así se abrió la primera grieta en la piedra, estuvo un buen rato delante de la piedra lunar y después tuvo pesadillas con mi padre todo el tiempo, incluso llegó a venir a mi habitación a decirme que papá estaba en casa, pero mi padre BaekHyun está enteradísimo desde hacía ya años, era todo fruto de su imaginación.

-Vamos a la habitación – le propuse agarrándolo de nuevo de la mano.

Lo saqué de allí y lo metí en mi habitación, donde el poder de la piedra lunar no nos alcanzaba, pero no me podía quedar ahí con él, había escuchado la puerta abrirse y la voz de YeJi saludar a Chungha, así que tenía que bajar, tal y como me dijo mi hermano.

-Quédate aquí un momento, ahora vuelvo – le dije quitándome la chaqueta – no te muevas, por favor – le pedí.

-No me voy, pero, ¿estás bien? – me preguntó frunciendo el ceño y mirándome preocupado.

-Sí – sonreí – tú espérame – me acerqué a sus labios para darle un beso y me marché de allí cerrándole la puerta.

Bajé al salón donde estaba Chungha y Lia también había llegado.

-¿Qué está pasando? – pregunté yo sentándome entré SooBin y YeonJun en el sofá.

-Las brujas de G-IDLE hicieron un fuerte aquelarre el otro día – empezó a explicar Chungha – han descubierto la manera de romper mi hechizo.

-¿Qué? – preguntó mi hermano – creía que era inquebrantable.

-Os dije que esto es territorio de las brujas de BlackPink, no tengo todo mi poder y G-IDLE son brujas negras, todas – nos recordó – romperán el hechizo, ya han hecho los primeros tres sacrificios, tres guardianes.

-Los tres eran policías – murmuró YeJi – ¿Quiénes son los siguientes?

-Tres curanderos, tres educadores y tres videntes – dijo ella – puedo mantener el hechizo siempre y cuando no los maten a todos, los aullidos que oís son de JungKook, marcan cada una de las muertes – nos explicó.

-¿Y qué coño hacemos? – preguntó BeomGyu con desesperación – ¿hay alguien que pueda fortalecer el hechizo?

-Kim Jennie, la bruja negra más poderosa de todas – nos dijo entrelazando las manos en su regazo – solo si lo hace con su hija.

-¿Quién es la hija? – pregunté yo.

-No lo sé – suspiró – pero si dais con BlackPink, Jennie y su hija podréis negociar con ella, por lo que sé están aliadas con un grupo de vampiros, hombres lobo y el otro híbrido, aliadas contra JungKook.

-¿Y sabes de la identidad de alguno de ellos? – le preguntó SooBin a mi lado.

-BlackPink me tiene bloqueado eso, no puedo saber sus identidades, ahora mismo ni siquiera puedo identificar a uno si lo tengo delante – se echó el pelo hacia atrás.

-¿Cómo es Jennie? – YeJi le acercó nuestro enorme libro y se lo abrió por la parte de las brujas – ¿es alguna de las dibujadas?

-Sí – asintió y lo hojeó – es ella – nos señaló el dibujo de una chica de pelo negro, liso y largo, su cuerpo era fino y tenía un aura oscura rodeándola.

-Es la que detuvo a Momo cuando fue a atacarme – aseguró ChaerYeong.

-Ella es JiSoo, pero ya la conocéis, y esta Lisa – señaló a otra bruja, con el pelo largo, rubio y con flequillo, no tenía rasgos totalmente coreanos – es una bruja roja – nos informó – ella Rosé – señaló a la última de ellas, dándonos por fin las cuatro caras definitivas – es una bruja gris.

-Madre mía, tienen el arcoíris ahí metido – susurró mi hermano frotándose la cara – ¿nos ayudará?

-En el fondo ya lo hacen – dijo con tranquilidad – esta batalla que tenéis no es contra los vampiros y los lobos que están con BlackPink, ellos también pelean contra JungKook.

Nosotros nos miramos entre todos, como si cada uno de ellos escondiese algún secreto sobre eso que acababa de decir.

CHAERYEONG POV

Era casi de madrugada cuando mi padre me llamó para que fuese a la casa donde vivía él, en la otra punta del pueblo, acababa de capturar a un vampiro y quería que lo torturásemos los dos juntos, así que fui enseguida, porque mi padre había capturado a un vampiro llevando ahí una semana y nosotros a ninguno llevando más de un mes y medio.

Cogí mis cosas y salí en completo silencio de casa, pero TaeHyun, mi mejor amigo, me pilló y quiso venir conmigo, así que lo dejé y nos fuimos juntos a casa de mi padre.

Era una casita pequeña de la que yo tenía una copia de las llaves, así que entré directamente y caminé al salón, donde oí los pasos de mi padre en la chirriante madera.

-Hola, papá – le dije besando su mejilla y sonriendo ampliamente.

-Hola, cariño – me abrazó tiernamente y miró a TaeHyun – ¿cómo estás?

-Bien – él sonrió – ¿y tú, tío SuHo?

-Bien, en teoría retirado, pero tengo asuntos de los que ocuparme – nos explicó mirando a un chico joven sentado en una silla, atado, con la cabeza agachada y todo mojado, debía ser verbena porque se olía desde donde estábamos, no lo podíamos ver bien, estaba todo muy oscuro.

-Me parece bien, pero, ¿ves algo? – le preguntó TaeHyun acercándose al interruptor de la luz para encenderla.

Cuando lo hizo, pude ver quién era ese chico y se me revolvió todo por dentro al ver que era Han.

Él levantó la cabeza y me miró fijamente, pidiéndome ayuda desesperadamente.

-¿Os conocéis? – preguntó mi padre.

-Sí – dije yo acercándome un poco a él.

-Sí, están casi liados – dijo TaeHyun detrás de mí.

-TaeHyun, cállate – le dije yo en un suspiro – eres un vampiro – murmuré a Han, que asintió con la cabeza – ¿qué vas a hacerle? – miré a mi padre.

-Lo que haga falta para que me diga donde está tu tío SeHun – me dijo él secándose las manos en un trapo que tenía colgado de la cintura.

-Espera, ¿el tío SeHun? – pregunté frunciendo el ceño.

-El tío SeHun está muerto – aseguró TaeHyun.

-No, su tumba o sus cenizas no están por ningún lado – dijo mi padre cogiendo del pelo a Han – además fui a la casa donde vivíamos todos, adivinad que encontré – metió las manos en uno de los bolsillos de su chaqueta y sacó un botecito pequeño – sangre de vampiro, la bebió antes de la última batalla.

-¿El tío SeHun es un vampiro entonces? – pregunté yo y él asintió – ¿RyuJin, YeJi y YeonJun lo saben?

-No lo creo – dijo dejando el botecito en una mesa – pero estoy seguro de que él sí – cogió una flecha de madera y plata y se acercó a él – y me lo va a decir.

Continuara…

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