Corea del Sur podría estarse enfrentando a un nuevo repunte de casos de COVID-19, luego de que este jueves se registraran casi 700 nuevos pacientes positivos, mientras que las infecciones esporádicas en todo el país complican aún más los esfuerzos para intentar controlar el virus.
Tal situación ha provocado que las autoridades sanitarias del país asiático consideren imponer restricciones aún más endurecidas para intentar contener la pandemia.
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Este día, Corea del Sur dio a conocer que se registraron 689 casos más de COVID-19, entre las cuales están incluidas 670 infecciones locales, lo cual ha elevado nuevamente el número total de casos llegando a los 112 mil 117, anunció la Agencia para el Control y la Prevención de Enfermedades de Corea del Sur (KDCA).
A pesar de que esta cifra es aún más baja que la del día anterior, ya que el miércoles se registraron 731 nuevos positivos, la cual se convirtió en el número más alto desde el pasado 7 de enero. El país agregó seis muertes más por COVID, aumentando el total de fallecidos a mil 788.
El medio de noticias Yonhap señaló:
“Las autoridades sanitarias expresaron sus preocupaciones sobre la cuarta ola de la pandemia en primavera, ya que las personas bajan su guardia e incrementan las actividades durante la temporada, advirtiendo del endurecimiento de las restricciones sobre las instalaciones multiuso y operaciones de los negocios si la tendencia actual continúa”.
-Yonhap News
La semana pasada el gobierno coreano decidió mantener el nivel actual de distanciamiento social hasta el próximo 2 de mayo, esto para intentar contener el virus lo más posible, mientras que se prohibieron las operaciones en las instalaciones de entretenimiento en el área metropolitana de Seúl y la ciudad portuaria de Busan.
Fuente: Yonhap News
